La gente piensa que el hustle se trata de ambición.

Para mí, siempre fue sobre sobrevivir.
No trabajo en varios empleos porque quiero. Lo hago porque he visto lo que pasa cuando tu única fuente de ingresos desaparece.

Cuando era niña, nadie hablaba de dinero. Pero vi los cambios:

Mi papá tomaba trabajo extra. 

Aunque mis padres nunca dijeron "no tenemos", aprendí a mantenerme preparado, incluso cuando las cosas se veían bien en el papel.

Hola, soy Cindy, fundadora de R.O.S.C.A., y años después, sigo cargando con ese miedo.

En este tema, estamos hablando sobre lo que realmente hay detrás de los adultos de alto rendimiento, por qué el descanso se siente inseguro, y cómo empezamos a desaprender la ambición desmedida cuando ya no nos está ayudando.

🌶 Por qué nunca he tenido solo un trabajo

🌶 Cuando la gente dice “solo descansa”

🌶 Lo que el éxito parece por fuera (y cómo se siente por dentro)

🌶 ¡Cómo realmente descanso!

🌶 Tandas y cundinas son más que dinero

🌶 Latiné Spotlight de la semana 👀

Por qué nunca he tenido solo un trabajo

No estoy hecha para confiar en un solo cheque de pago.
Desde que empecé a trabajar, siempre tuve un plan B. A veces, hasta tres.

Porque he visto lo que pasa cuando los trabajos deciden que ya no te necesitan.

Así que no dejo que sean mi única opción.

Incluso ahora, con mi contrato renovado y tres empleos más en marcha, sigo sintiendo ese destello de pánico. Ese susurro: “¿Y si mañana se acaba?”

Así que trabajo. Construyó. Me preparo para lo peor, por si acaso.

Cuando la gente dice “solo descansa”

A la gente le encanta decirle a las mujeres de alto rendimiento que descansen. Como si fuera tan fácil.
La verdad es que sí puedo descansar. Descanso muy bien.

Lo que no puedo hacer es decir no a nuevas oportunidades. Especialmente si hay dinero de por medio.
Porque he dicho que sí a situaciones loquisimas.

Como aceptar la carga de enseñanza de otra persona en el mismo mes que casualmente estaba dirigiendo una organización sin fines de lucro, además de enseñar en múltiples escuelas y manejar una startup. 

Y de alguna manera... lo logré. 

No porque esté hecho de manera diferente. Sino porque me he entrenado para mantenerme calmada en el caos. A veces demasiado calmada... 

Como cuando encontré un conejito ahogado en nuestra piscina que aún me destroza.

Cómo realmente descanso

No me engancho con series. Me engancho con libros.
Cuando estoy verdaderamente agotada, desconecto todo: laptop, celular, pestañas mentales… y me pierdo entre libros con mi hija.

A veces nos acostamos por horas y lo llamamos “pudrirnos”. Y honestamente, ahí es cuando sé que estoy sanando.

Si no descanso, mi cuerpo se apaga. Pero si no sigo en movimiento, mi mente se desborda.
Así que intentó balancear. Enseñó el descanso como una habilidad, a mí misma y a mi hija. Algunas semanas funciona. Otras no.

Lo que el éxito parece por fuera (y cómo se siente por dentro)

Para otras personas, probablemente parezco que tengo todo bajo control. 

Otro título. Otro triunfo. Otro puesto. Otro negocio. Pero mucho de lo que hago es simplemente pánico disfrazado. 

Hago que las cosas difíciles se vean fáciles. Así me criaron. No te quejas. No te quiebras. No te detienes por aplausos. Sigues adelante.

 Incluso cuando alcanzo una meta, realmente no la siento. Porque la meta se mueve. La presión se mantiene. 

Y el miedo de quedarme atrás nunca se va del todo.

Las tandas y cundinas son más que dinero

La mayoría escucha “tanda” o “cundina” y piensa que se trata de juntar efectivo.
Pero las más poderosas “tandas” o “cundinas” en las que he estado, nadie movía dinero.

Solo nos hacíamos responsables unos a otros. Y éramos honestos.
Puede ser una amiga escribiéndome: “Dijiste que no ibas a usar esa tarjeta esta semana. ¿Qué pasó?”

O un recordatorio de mi esposo: “¿Moviste tus ahorros antes de pagar esa factura?”
Eso es una tanda.

No se trata de apps o grupos con desafíos de ahorro.
Se trata de confianza, de la que te deja hablar de números sin tener que fingir.

Así funciona un buen círculo:

✔ Una meta compartida. Tal vez ahorrar $500. Tal vez sanar tu relación con las deudas.

✔ Reuniones regulares. Dos veces al mes.

✔ Honestidad y compromiso.

He formado tandas con familia, clientes, incluso con gente que conocí en Instagram.

Si están dispuestos a hablar de números reales, los incluyo.
Porque la verdad es que la mayoría no necesitamos más dinero.
Necesitamos menos vergüenza con el dinero que ya tenemos.

Eso es lo que quiero que sea R.O.S.C.A. No otro producto financiero.

Sino un lugar donde no tengas que resolverlo sola.

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Cuando piensas en liderazgo que cambia sistemas, Marlene Garayzar nos muestra cómo se hace. Cofundadora y Chief Governance Officer de Stori, se convirtió en la primera mujer mexicana en cofundar un unicornio fintech.

Bajo su liderazgo, Stori ha emitido más de 2 millones de tarjetas de crédito a comunidades desatendidas en México, generando acceso real, no solo titulares. En 2024, lideró una ronda de inversión de $212 millones y comenzó la expansión hacia Colombia.

Marlene no esperó permiso. Construyó una plataforma centrada en acceso, equidad e inclusión. Es prueba de que los sistemas financieros pueden rediseñarse desde la comunidad. La inclusión no es un añadido: es el punto.

Sigue conectada con su trabajo: [Twitter/X]